Estos días vivimos momentos difíciles, debido a los cambios que está introduciendo la pandemia del COVID-19 en nuestras vidas cotidianas. La gravedad y rapidez en la expansión del Coronavirus conlleva la necesidad de adoptar medidas excepcionales, que afectan a la cotidianidad de la población de manera general y que, en muchos casos, tienen que ver con la alimentación.

Desde la Red de Ciudades por la Agroecología -de la que la Fundación Entretantos desarrolla la Secretaría Técnica- pensamos que esto merece una reflexión de fondo, más allá de la esencial respuesta, contundente e inmediata, ante la crisis sanitaria.

En primer lugar, la presente crisis sanitaria pone de relieve la importancia de la buena alimentación como estrategia de salud preventiva. Resulta clave que los poderes públicos centren sus esfuerzos en hacer llegar una alimentación adecuada a toda la población:

  • Saludable: basada en alimentos vegetales frescos, legumbres, cereales, frutos secos, disminución de productos de origen animal y eliminación de alimentos procesados.
  • Sostenible: que no contamina – como la agricultura ecológica, la ganadería extensiva y la pesca sostenible- y que refuerza nuestra salud, al reducir nuestra exposición a tóxicos y a través de un medio ambiente saludable.
  • Local y de temporada: que incrementa la calidad de los alimentos, reduce los desplazamientos y refuerza las pequeñas y medianas producciones locales.

En segundo lugar, las medidas de aislamiento y cierre de flujos nos llevan a resaltar el papel de la provisión de alimentos en el entorno local, de cara a la seguridad alimentaria. Es necesario fortalecer y proteger las pequeñas producciones agroalimentarias sostenibles de proximidad -agricultura familiar, agricultura ecológica, agroindustria artesanal, ganadería extensiva y pesca artesanal y sostenible- y, especialmente, a las mujeres productoras ya que juegan un papel fundamental a la hora de garantizar un abastecimiento alimentario saludable y respetuoso con el medio ambiente. No en vano, la Agroecología ha sido reconocida por las Naciones Unidas como la principal estrategia para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.

El refuerzo de los tejidos económicos locales y sostenibles es una forma de adelantarnos en la reconstrucción que, tras la crisis, habrá que afrontar. Son estos tejidos locales de producción y distribución, de apoyo entre personas en un mismo territorio, los que están sosteniendo las muchas situaciones a las que las administraciones públicas no logran llevar su apoyo. Por ello, las administraciones públicas habrán de centrar esfuerzos en fortalecer los canales de distribución de proximidad, incluyendo los mercados de abastos y de calle, las asociaciones de consumo y el pequeño comercio. A su vez, sería necesario enfocar una compra pública para la ayuda alimentaria que fortalezca la producción y distribución locales, que son las que aportan empleo estable, seguridad, calidad, y una cohesión social que hoy, más que nunca, necesitamos.

Por todo ello, desde la Red de Ciudades por la Agroecología se resalta el papel de las políticas alimentarias locales para fortalecer nuestras comunidades frente a crisis como la del COVID-19. Se entiende la alimentación de calidad y sostenible como un sistema básico y estratégico de aprovisionamiento de nuestras ciudades y pueblos, equiparable al abastecimiento de agua o energía. Hoy es más evidente que nunca que debemos cuidar, de forma integral, la salud de las personas y el medio ambiente. Y cuidar, tanto la alimentación de todas las personas como las políticas alimentarias que llevamos a cabo, son claves esenciales para lograrlo.

La Red de Ciudades por la Agroecología está formada por las siguientes administraciones locales:

Ayuntamiento de Zaragoza (presidencia)
Ayuntamiento de Valladolid (vicepresidencia)
Ayuntamiento de València (secretaría)
Ayuntamiento de Murcia (vocalía)
Ayuntamiento de Aínsa-Sobrarbe
Ayuntamiento de Baztán
Ayuntamiento de Cardedeu
Ayuntamiento de Córdoba
Ayuntamiento de El Prat de Llobregat
Ayuntamiento de Fuenlabrada
Ayuntamiento de Godella
Ayuntamiento de Granollers
Ayuntamiento de Huétor-Vega
Ayuntamiento de Madrid
Ayuntamiento de Meliana
Ayuntamiento de Navás
Ayuntamiento de Pamplona-Iruña
Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid

A su vez, la Red de Ciudades por la Agroecología se ha dotado de un Consejo de Organizaciones Sociales, integrado por las siguientes entidades:

Asociación Del campo al Cole
Alianza de Solidaridad Extremeña
Associació de Consumidors i Productors La Magrana Vallesana
CERAI (Centro de Estudios Rurales y de Agricultura Internacional)
Departamento de Geografía de la Universidad de Valladolid
ECODES
Federación Ben Magec-Ecologistas en Acción
Fundació Espigoladors
Fundación Entretantos
Fundacion Mundubat
Garúa S.Coop.Mad.
Grupo de investigación SEJ-179 Universidad de Córdoba / Instituto de Sociología y Estudios Campesinos (ISEC)
Justicia Alimentaria | Veterinarios Sin Fronteras – Vetermon
La Caravana de Shiva
Mercado Social de Aragón (MesCoop, cooperativa de servicios)
Observatorio para el Derecho a la Alimentación de España
Per l’Horta
Slow Food Zaragoza
Sociedad Española de Agricultura Ecológica (SEAE)
Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón UAGA-COAG

Más información en https://www.ciudadesagroecologicas.eu/covid-19/